jueves, 26 de abril de 2012

Capitulo III – No te dejare

Capitulo III – No te dejare

Varios días han pasado desde que comencé a vivir junto a Himeko, cada día ella se levanta temprano para ir a trabajar y me deja solo en este lugar, mi nuevo hogar.

Desde aquella vez en que la bese mis noches no han sido tranquilas, me cuesta dormir y termino dando vueltas en la cama. Es este extraño sentimiento que me aqueja, no consigo comprenderlo bien, a veces intento luchar con todas mis fuerzas contra el, pero se hace mas fuerte que yo y se enciende cuando la hora de que ella vuelva esta por llegar, jamás pensé sentirme así de aturdido por alguien, es una sensación tan extraña y cautivadora que me hace sentir extremadamente feliz y al mismo tiempo disgustado.

-         ¿Será este sentimiento lo que llaman amor? – me pregunte en voz alta- Pero…-comencé a decir- yo siempre pensé que no necesitaba amor… ¿es posible que el destino sea así y me la este jugando? No lo se la verdad- cada día me confundo mas conmigo mismo.

Miro fijamente el reloj cada 10 minutos, la hora en que Himeko vuelve esta cerca.
Como quedo solo en casa ayudo con la limpieza y la comida, es lo mínimo que un huésped de tiempo completo como yo podría hacer.

-         Creo que eh terminado todo por hoy- digo mientras me seco el sudor de la frente- seria bueno tomar un baño antes de que vuelva –hablo y me alisto para ir al baño.

No se cuanto tiempo pase en la ducha, el día se hace eterno mientras ella no esta. Es tan molesta a veces la sensación de extrañar a alguien, me había acostumbrado a estar solo sin nadie que me esperara.

-         Creo que ya es la hora en que vuelve –dije mientras cerraba la llave de la ducha.

El silencio envolvió aquel lugar y pequeños pasos comenzaron a sentirse.

-         Debe ser Himeko que ya ha vuelto, mejor me apuro para poder recibirla –me dije a mi mismo mientras comenzaba a secarme y envolverme en una toalla.
-         Yatoh…! – se escucho a lo lejos- Yatoh… donde estas?.
-         Estoy aquí… - hable mientras sentía que los pasos se acercaban a la puerta del baño- estaba tomando una du…- intente decir cuando se súbito la puerta fue abierta.

Una ráfaga de rubor subió a mi cara, Himeko estaba ahí en la entrada del baño y su cara también se tiño de rojo, ambos quedamos expectantes, cruzamos nuestras miradas sin saber que hacer.

-         Yo… estaba…en la ducha…- dije entupidamente mientras aferraba la toalla a mi cintura.
-          Yo…- ella me miraba sonrojada a mas no poder- ¡lo siento! Debí… debí…- dejo la frase a medias y salio corriendo fuera del baño sin antes notar que una lagrima rodaba por su mejilla.
-         Mierda…Himeko espera! – grite mientras trataba de alcanzarla.

Corría apenas, ni siquiera pensé que estaba desnudo y cubierto solamente con la toalla de mi cintura.

Estaba entrando a su habitación cuando la tome del brazo.
-         ¡Espera, perdón, yo solo estaba tomando un baño! – dije exaltado, no sabia que mas decir, la situación era realmente extraña.
-         ¡Ya lo se! –grito- es solo… es solo… ¡pensé que te habías ido! Me precipite y comencé a buscarte –hablaba mientras comenzaban a rodar suaves lagrimas de sus ojos- ¡fui muy entupida!
-         Yo… de verdad lo siento –no sabia que decir, me sentía demasiado mal al verla llorando- Himeko… por favor no llores.
-         Perdóname Yatoh –hablaba mientras las lagrimas se hacían mas grandes- pensé que te habías ido, que me habías dejado sola, perdón pero no puedo dejar de llorar…

Sus palabras me conmovieron, entre en pánico y no pensé en mis actos, sentí ese impulso una vez mas y la rodee con mis brazos.

-         Himeko por favor, no llores, no me iré –dije mirándola a los ojos- te prometí que estaría contigo, es decir, ¡que estaré contigo!
-         ¿Lo dices en serio? –pregunto mirándome a los ojos mientras ella correspondía mi abrazo.
-         Así es, no me alejare de ti, me gusta este lugar, te prometo que no me marchare nunca.
-         ¿Prometes que nunca me dejaras sola? –me miraba casi en tono suplicante.
-         Prometido –asentí con una leve sonrisa.

Nuestros rostros estaban cada vez mas cerca, mi cabello húmedo dejaba caer suaves gotas sobre su rostro bañado en lágrimas.
Quería decirle que un sentimiento hacia ella crecía en mi interior, que cada día las ansias por verla volver crecían mas y mas, que ya estaba casi seguro que esta revolución de impulsos me convencían cada día mas y mas que era amor, pero no fui capaz de decir nada. Un escalofrío recorrió mi espalda, sentí que la ansiedad de toda esta espera que había llegado a su limite, mire a Himeko que aun mantenía la vista alta como a la espera de algo, la abrace mas fuerte aun y sin pensarlo dos veces la bese.

Ella me correspondió y nos besamos quien sabe por cuanto tiempo en el umbral de su habitación.

3 comentarios:

Kathia dijo...

Aaaaaaaaaaah! Lo Amee! *o* Cuando viene el proximo?
Te quedo genial Alejandra-Chii

Anónimo dijo...

ahahah 0oralezzzzzzzzz estee es el espacio0 del pasado00 jajaaa esta freso0n yeahh peero00 esta relargo00 pero0 esta freos0nhay tevan +10 punto0zz por freso0n yeahh

Luuh soloaga dijo...

que hermoso capitulo, esta muy bonito tu blog, soy nueva en este sitio, :$ te visitare luego, saludos!!